jueves, 31 de diciembre de 2009

Duda de última hora

¿Cuándo empieza el año?

¿Con los cuartos? ¿En la primera campanada? ¿En la última? ¿Entre medias?

¡¡Rápìdo!! Que sólo quedan unas horas...

miércoles, 30 de diciembre de 2009

Balance anual

Bueno, ya no queda casi nada para que acabe este año que tantas experiencias y sensaciones ha deparado, hasta el punto de convertirse en un "año largo". Sin duda creo que ha sido el año más importante de mi vida (que no implica que sea el mejor). De él destacaría varias cosas:


- Las sensaciones: Desde principio de año me he sentido agobiado con mi trabajo, no porque tuviera que hacer horas extras, mi jefe me presionase o tuviese mucha tarea (nada más lejos), sino porque sentía que lo que hacía allí no tenía sentido y estaba desperdiciando mi tiempo (que, al fin y al cabo, es todo lo que tengo). Sentía que mi labor era totalmente externa a mí y no encontraba ninguna satisfacción en realizarla (y bastante bien que la hacía, por cierto). Todos esos sentimientos me paralizaban hasta el punto que no me sentía cómodo, miraba constantemente el reloj deseando que llegase la hora de irme y era incapaz de relacionarme con mis compañeros de trabajo.

Ahora estoy muchísimo mejor (ni punto de comparación). Ya no me siento un esclavo de mi trabajo, tengo mucha más libertad y eso hace que trabaje bastante más. Siento el trabajo como algo mío, en lo que yo voy decidiendo más o menos qué hacer con el asesoramiento de mi jefe. Me siento cómodo, no me preocupa la hora de salida y he conseguido crear muy buenas relaciones con mis compañeros.

La única pega es que debido a que estoy estudiando y trabajando a la vez no tengo mucho tiempo y me agobio. Sé que es algo temporal y eso me da fuerzas para superarlo. Además, aunque al principio me costaba más y dormía muy poco, ahora le voy pillando el tranquillo, aprovecho más el tiempo y duermo poco (sin el "muy").


- La fuerza de voluntad: Si hay algo de lo que puedo estar orgulloso este año es del hecho de haber conseguido cambiar una situación que no me gustaba, en vez de quejarme amargamente (que también, como muchos habréis sido testigos). No ha sido una tarea fácil y aunque las opiniones de mis más allegados me han ayudado bastante, mi círculo familiar no me lo ha puesto nada fácil. A pesar de sentirme incomprendido por ellos, he tenido muy claro que era lo que no quería en mi vida, aunque realmente haya tenido (y sigo teniendo) muchos problemas en encontrar qué es lo que quería.

Al final conseguí cambiar la situación acompañado de algo de suerte a la hora de encontrar un trabajo compatible con los estudios. He perdido toda la estabilidad que me daba el anterior trabajo (además de 400 euros mensuales), pero he ganado en vida. Sin duda alguna, compensa.


- Los viajes: Durante este año he realizado dos viajes que me han dejado marcado. Curiosamente ambos fueron "viajes para desconectar" y viajando 'solo'. El primero fue a Alemania en el punto en el que me sentía más agobiado por el trabajo. Sin duda esos días por Berlín me hicieron abrir los ojos y ver las cosas con más claridad. Llegué a tener claro que quería salir de mi trabajo y si por mí hubiera sido lo hubiera hecho el día siguiente a llegar a Madrid. Aunque tuviera que esperar 6 meses para llevarlo a cabo, en la capital alemana germinó la semilla.

El otro viaje al que me refiero fue el que realicé desde Astorga a Fisterra a patita (Camino de Santiago). En esta ocasión más que aclarar ideas, lo que necesitaba era olvidarme de todo lo anterior y coger fuerzas para afrontar la nueva etapa que se abría ante mí. Y no sólo cumplió su cometido con creces, sino que fue una experiencia magnífica (y que espero repetir).


Sin duda, este año ha sido crucial en los siguientes, alternando diversas fases de alegría, depresión, claridad, estrés, liberación, felicidad, ...

domingo, 27 de diciembre de 2009

Cosas que no soporto

Una de las cosas que no soporto y que no soy capaz de entender es "la educación legal". Ahora explico este término que me acabo de inventar.

Me refiero a la gente que actúa según la legalidad vigente. Gente que antepone la ley a sus convicciones morales. Gente que no roba o agrede porque la ley le dice que no está bien, no porque no crea que sea ético.

Me asusta. Sinceramente, me asusta.

Me asusta que a raíz del carnet por puntos disminuyan notablemente las muertes por accidente de tráfico. La consecuencia me alegra, obviamente, pero la razón me entristece como persona. Como ser humano. Como especie.

¿Realmente puede existir alguien a quien acojone más perder el carnet de conducir que perder la vida?

Me entristece que en nuestras escuelas no se nos enseñe a pensar por nosotros mismos, sino a aceptar un código totalmente ajeno a nosotros. Pero sobretodo, que se nos enseñe como un dogma de fe.

Se nos trata como a inútiles, que no debemos ni pensar en las cosas porque ya se dedicaron nuestros antepasados en pensarlas por nosotros. Y si te lo planteas, no eres más que "un loco", "un friki" o incluso "un sectario".

sábado, 28 de noviembre de 2009

Mi mesa tiene más de tres patas

Bueno, últimamente con esto de estudiar y trabajar a la vez apenas dispongo de tiempo para nada. Así que aprovecho, como estoy haciendo últimamente, a recomendaros otro blog. En este caso, le ha llegado el turno a Mi mesa cojea (un blog de humor que en esta entrada se pone más serio):


España S.A.

Según el último barómetro del CIS, la clase política preocupa más a los ciudadanos que el terrorismo. Mientras, los políticos presuntamente corruptos revalidan su intención de voto en todas las comunidades donde gobiernan.

En la clasificación mundial de Reporteros Sin Fronteras sobre la libertad de prensa, España cae en 2009 hasta el puesto 46. El motivo principal es la amenaza terrorista que sufren los periodistas (esa amenaza que ya no preocupa tanto como la corrupción política). El segundo motivo es el reciente fenómeno por el cual los políticos no aceptan preguntas en las ruedas de prensa.

Los grandes partidos contratan a las mejores agencias de publicidad (DDB España, Sra. Rushmore…) para crear sus vídeos, sus mítines, sus webs y sus eslóganes/mensajes. Las legislaturas se vuelven campañas. Los votantes, targets comerciales.

Los partidos empiezan a enviar comparecencias grabadas por ellos mismos, sin presencia de ningún periodista. Todas las cadenas de televisión lo emiten como si fuera información sólo porque lo parece. Los periódicos copian y pegan las notas de prensa. La propaganda ocupa la primera página, convirtiéndose, de facto, en la noticia del día. Algunos periodistas protestan en sus columnas, pero no deja de ser su opinión. La agenda del país se adecua a los intereses de los partidos. Hoy, el Alakrana. Mañana, Sitel. Pasado, la ley del aborto.

El infoshow se asienta definitivamente en España, convirtiendo la mayor parte de los informativos televisivos en una cronología de sucesos repletos de adjetivos hipertróficos. La información empieza a tratarse con las reglas de la ficción, aplicando parámetros dramatúrgicos a la realidad. Así, la Gripe A se convierte en un arco argumental repleto de giros de trama artificiales. La información se vuelve indistinguible de la especulación, la propaganda y el espectáculo patrocinado.

Las tertulias radiofónicas y televisivas se llenan de agentes comerciales de medios de comunicación vendiendo la línea editorial impuesta por sus directivos. Los espectadores contemplan las tertulias y debates para reafirmar sus posiciones, para apoyar a los suyos. La política se convierte en un evento deportivo. La democracia es La Gran Liga.

A medida que crece la incertidumbre económica por esta crisis que nunca nos afectaría, confiad en mí, crece la propaganda y disminuye, hasta casi desaparecer, la información contrastada. El periodismo se desvanece bajo los intereses de los grupos de comunicación en permanente guerra comercial por derechos o prebendas. Las voces disidentes que aún resisten en nómina son enviadas a casa, a escribir una novela, o a Oriente Medio, a reportar noticias lejanas que no afecten a la correcta sinergia poder-empresa nacional.

La verdad, para el ciudadano, se limita a lo tangible y a lo inmediato. A lo que ve y oye por sí mismo. A su casa y su calle. Y los políticos, con una máscara de cinismo diseñada por la mejor agencia de publicidad del país, se preguntan por qué tanto desencanto político. Por qué tanta indiferencia democrática. Por qué tanto fracaso de valores entre los jóvenes… ellos, que lo tienen todo.


Fuente: Mi mesa cojea

Si os gusta, os recomiendo ver una entrevista que le hicieron al autor del blog.

domingo, 8 de noviembre de 2009

Nuevos modelos de comunicación

Un día de éstos tendría que escribir algo por mí mismo, pero por ahora vuelvo a recurrir al copy&paste. Bueno, al menos os recomiendo blogs interesantes. Hoy le ha tocado el turno a El sentido de la vida (aunque el blog no suele ser de este estilo, ni mucho menos):


Algunas de las cosas que aprendí en los últimos años y que me conviene recordar.

A nadie le van a resultar útiles, así que aquí las dejo:

- Nadie sabe lo que estoy pensando. Esos pensamientos, esas voces que tan claramente puedo escuchar en mi cabeza, todas esas cosas que me digo en mi conciencia, quedan ahí. Si van a algún otro lugar, lo desconozco. Ergo, nadie sabe lo que estoy pensando, y es mi responsabilidad ser consciente de ello.

- Ya que los demás no pueden escuchar mis pensamientos, debo comprender que la gente no sabe lo que me pasa por la cabeza. Es mi responsabilidad, por tanto, comunicarme efectivamente mediante la palabra o cualquier otro recurso del que disponga. Es también mi deber aprender a controlar mi propia mente, así como mi palabra y otros recursos a mi alcance.

- No sé lo que los demás están pensando. Cuando estoy hablando con otra persona, no sé lo que está pensando. Puedo engañarme e incluso puedo llegar a hacerme creer a mí mismo que sé lo que la otra persona se dice a sí misma en su cabeza. Es mi responsabilidad ser consciente de estos hechos para comprender los comportamientos de otras personas. Es también mi deber descubrir otras técnicas de auto-engaño que pueda haber instalado a lo largo de mi vida.

- Mis emociones son sólo mías, y afloran por mecanismos que yo mismo he instalado inconscientemente en el pasado. Me conviene revisar mi circuitería interna y encontrar la manera de recablear mis emociones de manera que actúen a mi favor. Si me siento mal es culpa mía, y es mi responsabilidad arreglarlo por mi cuenta evitando implicar a otras personas con mis reacciones a mis emociones. Corolario: Yo me hago cargo de mis emociones, luego los demás se hacen cargo de las suyas. Reacciones desproporcionadas de otras personas ante mí son asunto suyo. Si deseo ayudar a aquellos que se encuentran mal, debo asegurarme primero de que yo me encuentro bien.

- Cada persona vive en su propia realidad, en un mundo completamente subjetivo que desconozco hasta puntos que ni siquiera sospecho. Cada uno de los seres que me rodean experimentan su propia realidad de la misma manera que yo experimento la mía. Me conviene ser consciente de la subjetividad inherente a la existencia.

- Mis creencias moldean mi propia realidad. Mis creencias las elijo yo. Tengo el poder de revisar mis propias creencias y sustituirlas por otras a mi conveniencia. Algunas de mis creencias me impulsan, otras me pesan. Me conviene eliminar las segundas y transformarlas en las primeras.

- Poseo el deber, el derecho y el privilegio de conocerme a mí mismo y de conocer a los demás. Esto incluye, entre otros, definir claramente dónde acaban los demás y dónde empiezo yo; así como dilucidar cuáles son mis deseos, mis anhelos, mis metas y mis aspiraciones.

- Mucho mejor que la guerra y la violencia son la paz y la armonía.

- Todo el mundo es importante. Todo el mundo cuenta.

- Tengo la facultad de ser consciente de cuándo necesito ayuda y de expresar esa necesidad. Tengo el deber, el derecho y el deseo de ayudar a otros.

- Debo ser comedido con mis opiniones. Debo ser comedido con mis consejos. Es muy fácil dar un consejo equivocado debido a que siempre desconoceré la totalidad de los detalles. Y he descubierto que a menudo un detalle lo cambia todo. Un detalle convierte el blanco en negro y viceversa. Así pues, precaución.

- No hago lo que me dicen que haga. No hago lo que tengo que hacer. Hago lo que siento que debo hacer. Yo decido mi vida, yo elijo mis responsabilidades y corro con las consecuencias de mis actos y de mis palabras. Yo soy mi propio y mi único juez.

- Me esfuerzo en descubrir mi propia verdad y la empleo para reconstruirme sobre ella. Hay gente que morirá sin haber nacido. Yo me comprometo a morir y a renacer tantas veces como sea necesario, en beneficio propio y de los demás.

- Yo soy la persona más importante de mi vida.



Fuente: El sentido de la vida

PD: El título de la entrada tiene su razón de ser. Si no lo pillas es que no estás en las 'nubes' (guiño, guiño).

jueves, 8 de octubre de 2009

Imágenes que hacen pensar

Hoy os pongo un par de imágenes interesantes:






Y a raíz de la segunda imagen, una reflexión de la periodista Ellen Goodman:

Un estilo de vida «normal» es vestirse con la ropa que has comprado para ir a la oficina y conducir a través del tráfico de la ciudad un coche que todavía estás pagando, todo ello para llegar a un puesto de trabajo que necesitas para poder permitirte pagar la ropa y el coche, además de la casa que se pasa todo el día vacía.


Visto en La Lengua y Microsiervos, respectivamente.

miércoles, 30 de septiembre de 2009

Qué llevar al Camino de Santiago

Ya que he vuelto a parecer un novato a la hora de hacer la mochila, hago la lista ahora que la tengo reciente para la próxima vez (que, sin duda, la habrá):

(Entre paréntesis lo opcional)


Ropa (lo más ligera posible)
  • 1 Forro polar [no llevar abrigos ni sudaderas]
  • 1 Chubasquero o poncho por si se pone a llover (mejor si te cubre entero) [no llevar paraguas]
  • 1 Pantalones largos (mejor si son cortos extensibles) [no llevar cinturón]
  • 2 Pantalones cortos (son los que utilizarás casi todos los días) (con bolsillos a poder ser)
  • 3 Camisetas, Calzoncillos y pares de Calcetines (se van lavando y secando)
  • 1 Gorra o boina
  • (1) Bañador
  • (1) Braga
  • (1) Pijama (se puede dormir con ropa normal)


Calzado
  • 1 Botas para andar (nada de estrenar calzado)
  • 1 Chanclas para la ducha (que se sequen rápido)
  • (1) Un tercer calzado (¿pantumflas?) que pese poco para descansar el pie


Higiene
  • 1 Neceser pequeño
  • 1 Cepillo de dientes y pasta (tubo pequeño a poder ser)
  • 1 Bote de gel (mediano)
  • 1 Bote de champú (pequeño)
  • 1 Peine (pequeño)
  • 1 Bote de desodorante (pequeño y a medias)
  • 1 Toalla (pequeña, del Decathlon)
  • 1 Papel higiénico (por si acaso) [no hace falta kleenex]
  • 1 Jabón para lavar la ropa
  • (1) Jabón y cuchilla para afeitarse
  • (1) Cortauñas (si se va estar mucho tiempo fuera)


Utensilios para andar
  • 1 Mochila (a poder ser que tenga para que no se junte mucho a la espalda, que tenga para atarla por la cintura y que se pueda abrir a lo largo)
  • # Bolsas para separar las cosas y más por si son necesarias
  • 1 Cubre mochilas (por si llueve) [no hace falta si el poncho la cubre o si está incluido en la mochila]
  • 1 Botellita de agua [mejor casi que una cantimplora, por el peso]
  • 1 Guía del Camino
  • (1) Mochila de tela (para llevar algo una vez llegado al pueblo)
  • (1) Linterna (por si se va a andar antes del amanecer)


Utensilios para dormir
  • 1 Saco de dormir (pequeño) [no hace falta aislante]
  • 1 Credencial de peregrino
  • (1) Tapones para los oídos (para los ronquidos)
  • (1) Funda de almohada (por higiene)


Utensilios para comer
  • (1) Cubiertos [no hace falta navaja]
  • (1) Abrelatas
  • (5 aprox.) Barritas de cereales para las mañanas


Otros utensilios
  • 1 Mini-Botiquín (por si las moscas)
  • 7 aprox. Imperdibles para colgar la ropa a la mochila y se seque (o lo que haga falta)
  • 1 Móvil (hará las veces de despertador y reloj) y su cargador
  • (1) Cámara y pilas o cargador de batería
  • (1) Cartas para jugar
  • (1) Una libreta y un boli para escribir
  • (1) Libro (finito) para leer

viernes, 26 de junio de 2009

No todo es lo que parece


En ocasiones nos creemos conocer la realidad, pero ésta no siempre es como creemos. Por ejemplo, en la imagen de arriba veis una espiral verde y otra azul, ¿no?

¿Las veis?

¿Realmente?

¿Estáis seguros de que son verde y azul y no de algún otro color?

¿Y qué pasa si yo ahora os digo que no son verde y azul?

¿Y si os digo que las dos son del mismo color?

Comprobación y explicación en Microsiervos

lunes, 22 de junio de 2009

'El mendigo y el ladrón' (1915) por Ricardo Flores Magón

A lo largo de la avenida risueña van y vienen los transeúntes, hombres y mujeres, perfumados, elegantes, insultantes. Pegado a la pared está el mendigo, la pedigüeña mano adelantada, en los labios temblando la súplica servil.

- ¡Una limosna, por el amor de Dios!

De vez en cuando cae una moneda en la mano del pordiosero, que éste mete presuroso en el bolsillo prodigando alabanzas y reconocimientos degradantes. El ladrón pasa, y no puede evitar el obsequiar al mendigo con una mirada de desprecio. El pordiosero se indigna, porqué también la indignidad tiene rubores, y refunfuña atufado:

- ¿No te arde la cara, ¡bribón!, de verte frente a frente de un hombre honrado como yo? Yo respeto la ley: yo no cometo el crimen de meter la mano en el bolsillo ajeno. Mis pisadas son firmes, como las de todo buen ciudadano que no tiene la costumbre de caminar de puntillas, en el silencio de la noche, por las habitaciones ajenas. Puedo presentar el rostro en todas partes; no rehuyo la mirada del gendarme; el rico me ve con benevolencia y, al echar una moneda en mi sombrero, me palmea el hombro diciéndome. “¡buen hombre!”

El ladrón se baja el ala del sombrero hasta la nariz, hace un gesto de asco, lanza una mirada escudriñadora en torno suyo, y replica al mendigo:

- No esperes que me sonroje yo frente a ti, ¡vil mendigo! ¿Honrado tú? La honradez no vive de rodillas esperando que se le arroje el hueso que ha de roer. La honradez es altiva por excelencia. Yo no sé si soy honrado o no lo soy; pero te confieso que me falta valor para suplicar al rico que me dé, por el amor de Dios, una migaja de lo que me ha despojado. ¿Qué violo la ley? Es cierto; pero la ley es cosa muy distinta de la justicia. Violo la ley escrita por el burgués, y esa violación contiene en si un acto de justicia, porque la ley autoriza el robo del rico en perjuicio del pobre, esto es, una injusticia, y al arrebatar yo al rico parte de lo que nos ha robado a los pobres, ejecuto un acto de justicia. El rico te palmea el hombro porque tu servilismo, tu bajeza abyecta, le garantiza el disfrute tranquilo de lo que a ti, a mi y a todos los pobres del mundo nos ha robado. El ideal del rico es que todos los pobres tengamos alma de mendigos. Si fueras hombre, morderías la mano del rico que te arroja un mendrugo. ¡Yo te desprecio!

El ladrón escupe y se pierde entre la multitud. El mendigo alza los ojos al cielo y gime: -¡Una limosna, por el amor de Dios!


Vía Mimetist

¿Y tú? Si tuvieras que elegir... ¿mendigo o ladrón?

miércoles, 17 de junio de 2009

El sentido de mi vida

Tenía pensado publicar alguna otra entrada antes, pero como ayer traté el tema con los dos únicos lectores del blog (si hay alguien más ahí, que se manifieste, jeje) creo que es oportuno sacar el tema a la palestra.

Es curioso, nos autodenominamos "animales racionales" y luego no ponemos en práctica nuestra capacidad de raciocinio. Podemos vivir cerca de 100 años (que se dice pronto) sin llegar a preguntarnos por qué hacemos las cosas, qué buscamos, qué perseguimos. Existe un cierto temor generalizado a plantearnos seriamente la pregunta de marras: "¿cuál es el sentido de la vida?". Puede que sea debido a las respuestas que podamos obtener (o al miedo a no obtener respuestas), que es posible que nos hagan tener que dar un giro radical a nuestra vida o por el miedo a no ser capaz de cumplirlas, por lo que nuestro conformismo actúa de forma represora. Otras veces se debe a que simplemente, no se nos ha ocurrido planteárnoslo.

Sin embargo, aunque nos planteásemos la dichosa cuestión, no obtendríamos las respuestas deseadas si no realizamos la pregunta adecuada. Ésta debería ser "¿cuál es el sentido de mi vida?"

Después de muchos años simplemente tirando pa'lante sin plantearme nada, he llegado a un punto en el que me siento bastante asqueado con el trabajo y hacia donde está yendo mi vida. Nunca dejará de sorprenderme mi capacidad de aprender de los malos momentos (y lo que me cuesta aprender en los momentos 'neutros', ni buenos ni malos). Todo ello ha provocado que me pregunte la eterna cuestión y empiece a vislumbrar las primeras repuestas, siendo éstos los principales pilares:

- Felicidad: El ser humano es egoísta por naturaleza, pues busca ante todo su propio bien, aunque depende de cada uno si éste es conseguido ayudando a los demás o pasándoles por encima. Este asunto (creo) que no se puede perseguir como tal, sino que será la consecuencia última de cumplir los demás puntos.
Igual que pasa con la amistad o el amor, se puede hacer por buscarla o cuidarla una vez encontrada, pero no se puede forzar. Sin embargo, nosotros podemos procurar que las condiciones sean las idóneas para que surja: difícilmente brotará una flor rodeada de malas hierbas.

- Libertad: ¿Hasta que punto somos libres? Estamos sometidos a miles de reglas y deberes "por nuestro bien". Nuestros padres tienen unos planes para nosotros y sentimos una presión social para hacer "lo que debemos hacer".
El primer paso hacia la libertad es ser conscientes de nuestras cadenas, así como dejar de verlas como algo inamovible. Hasta que no seamos capaces de abandonar ese conformismo y hacer algo por cambiarlo más que meras palabras, no empezaremos a coger las riendas de nuestra vida.

- Sabiduría: No sólo se trata de la búsqueda del conocimiento, sino del razonamiento del mismo. No se trata de acumular datos sin ton ni son, sino de intentar ampliar la capacidad mental mediante la reflexión, en un plano más filosófico.
Mi objetivo es poder alimentar la mente para que ésta dé de sí todo lo posible y no se sienta limitada. No creer que mi formación ya ha terminado sino que ésta nunca se detiene y hacer por continuarla.

- Utilidad: Ante todo, el ser humano es un ser social. La gran mayoría de la gente tiene la necesidad de sentirse realizados viendo que sus actos tienen un efecto, pensar que el mundo sería distinto si no fuera por ellos. Hay quien palia este sentimiento volcándose en su trabajo, hay quien pinta tags en las paredes, hay quien directamente se cree superior al resto, hay quien cree que el mundo se desmoronaría si no fuera por ellos, ...
Sin embargo, mi intención es lograr paliar esta necesidad sintiendo que mi vida tiene una utilidad (real) y de ayuda a los demás. A veces no hacen falta grandes logros, puede ser suficiente con ayudar a algún amigo que lo necesite. Pero aparte de pequeños actos, me gustaría que mi vida profesional también estuviera enfocada en ese ámbito, aunque es complicado.

¿Qué hacer para encaminar nuestra vida hacia estos objetivos? Es complicado obtener unas respuestas concretas, pero éstas irán apareciendo según vayamos siendo fieles a nuestros objetivos. Por ahora, las posibles soluciones que abordo son: dejar el trabajo (a pesar de la manida "crisis"), tomarme unos días de retiro, volver a estudiar, aprender/practicar Filosofía, enfocar mi vida laboral hacia la educación, ...
Siento cierto temor porque me dirijo hacia caminos desconocidos, pero saco el valor necesario para afrontarlo de saber que cuando algo no me gustaba he sido capaz de hacer por cambiarlo.
Nadie dijo que iba a ser fácil.

lunes, 15 de junio de 2009

lunes, 8 de junio de 2009

La rutina. El día de la marmota

En la vida en pareja siempre ronda cierto temor a la rutina. Todos hemos oído alguna vez a alguien justificar el fin de una relación con un "caímos en la rutina". Sin embargo, la rutina casi nunca suele ser la culpable. Para demostrarlo, dividiremos a las relaciones en dos tipos distintos:
  1. Relación en la que haces muchas cosas, cada semana algo distinto. Estarás bastante ocupado y encontrarás el entretenimiento en lo que hagas, más que en la persona que esté contigo.
  2. Relación en la que haces siempre lo mismo. Cómo te lo pases dependerá de tu acompañante. Si no congenias bien con él/ella, acabarás "harto de la rutina".
Cuando una pareja empieza la relación es más parecida al primer caso (es todo nuevo, tratas de innovar más a menudo, ...), pero con el tiempo la relación se va estabilizando y se parece más a la segunda. Y ahí es cuando empiezan a conocer realmente a la otra persona y ven si se lo pasan bien por lo que hacen o por cómo es su pareja.

Llegado este punto hay muchas parejas que lo dejan, echando la culpa a la rutina. La rutina ha provocado la ruptura de la pareja, pero no por sí misma sino porque ha dejado vislumbrar que ambos no son compatibles.

El principal problema de esto es que los muy pánfilos piensan "hemos roto por haber caído en la rutina; la próxima vez intentaré hacer todo lo posible (ir cada día a un sitio distinto, no hacer cosas por costumbre, ...) para no caer en la rutina". Pero los muy zoquetes no se dan cuenta que así lo único que consiguen es alargar el tiempo hasta que se conocen realmente. Los hay incluso que para salir de la rutina se van a vivir juntos, se casan o incluso tienen descendencia.

Pero tarde o temprano, caerán en la rutina y verán cómo es el otro. Y como no te guste... mejor haberte dado cuenta prontito... que haciendo partición de bienes y de custodia compartida.

Obviamente, esto también es aplicable a las relaciones de amistad. Si tienes una buena relación con tus amigos puedes quedar siempre en el mismo sitio, ir a cenar al mismo restaurante, tumbarte en el mismo césped e ir al mismo garito de siempre... y te lo pasarás genial porque disfrutas más de su compañía que de la novedad que supone ir a un sitio nuevo. Sin embargo, si intentas hacer eso mismo con otros amigos con los que no te lleves tan bien acabarás "harto de la rutina". ¿De la rutina? No.

martes, 26 de mayo de 2009

Derecho a equivocarme

Cuando somos pequeños vamos al colegio "por nuestro bien". Con el tiempo vamos eligiendo las asignaturas y, con esto, el resto de nuestra vida. Vamos a la universidad porque "es lo que hay que hacer". Y cuando acabamos debemos ponernos a trabajar en una empresa "para ganarnos el pan".

Ahora en serio, ¿dónde están las cámaras ocultas? Porque uno no está 23 años formándose (en el mejor de los casos) para pasarse el resto de su vida haciendo un trabajo rutinario y sin ninguna motivación personal más que hacer más rico a nuestro jefe, para que éste pueda comprarse un papel higiénico más suave y esponjoso. A cambio, podremos comprarnos una tele enorme y un montón de cosas que realmente no necesitamos.

No hay trato.

Parece tan evidente que extraña verse rodeado de tanta gente que hace eso mismo y no parece plantearse nada. ¿No lo hacen? ¿Lo hacen pero no ven otra posibilidad? ¿o es que realmente se sienten realizados?

El problema viene cuando uno trata de salirse del rebaño para buscar algo que le llene como persona y en vez de recibir ánimos por mostrar el valor suficiente para arriesgar en pos de buscar su propio camino, uno no recibe más que reprimendas por dichas ideas. Se le acusa de "tirar la toalla" o se recurre al chantaje con un "me decepcionarías", cuando lo decepcionante debería ser realizar un trabajo que no te gusta como si fueras un autómata y tirar la toalla de tomar el control de tu vida.

No parecen darse cuenta de que todo el mundo no quiere para sí el mismo destino y no se debería reprimir a aquellos que intentan buscarse el suyo propio, aunque fuese únicamente por el placer de tomar los mandos del barco. Hasta que uno no toma el control de su vida no se llega a sentir verdaderamente vivo.

Sólo estoy pidiendo el derecho a equivocarme


jueves, 22 de enero de 2009

Aprender Alemán: Verbos II

Después de la primera entrega, no perdamos más tiempo y pasemos a la segunda. Es muy recomendable intentar recordar los verbos que ya hemos visto y los que no recordemos los repasemos (mediante su asociación).

Escribir: Schreiben [Sgáiben]
Buscas pareja por internet y escribes en un foro "Si es usted gay ven a reunirte conmigo"

Firmar: Unterschreiben [Untersgáiben]
En Alemania firman los documentos untando mantequilla debajo de lo escrito

Poder: Können [Kónen]
No existe nadie más poderoso que Conan el bárbaro

Hacer: Machen [Májen]
La nueva becaria es tan maja que hace el café en casa y te lo trae calentito

Trabajar: Arbeiten [Arbáiten]
Con la crisis el único trabajo que has encontrado es de árbitro, pero no lo aceptas porque te insultarían

Fabricar: Herstellen [Jérstelen]
Visitas una fábrica de teles en las que echan el programa Gente

Pensar: Denken [Dénken]
Después de pensarlo mucho, todo sale mal. Piensas "¿De qué me sirve pensar tanto?"

Imaginar(se): (sich) Vorstellen [(sich) Vorstelen]
Te pones a imaginar como será la tele en Argentina y como ellos dicen tanto
"vos", imaginas que el canal sería VosTele

Creer: Glauben [Gláuben]
Los creyentes son tan ilusos que creen que inflando globos irán al cielo

Saber: Wissen [Vísen]
En la sociedad actual, el más sabio es aquel que mejor sabe usar la tarjeta Visa

Conocer: Kennen [Kénen]
Tu padre conoció a Kennedy, antes de que éste muriera

Recordar: Erinnern [Erinern]
Recuerdo perfectamente el primer día que vi a Irene, llevaba una cruz celta

Olvidar: Vergessen [Vergesen]
Estás dando una charla y te olvidas de lo que tienes que decir, sintiendo una vergüenza tremenda

Estudiar: Studieren [Estudíren]
Vas a un partido del Estu y te estudias los cánticos para no parecer nuevo: ”aplaudiré y ‘Estu‘ diré

Comprender: Verstehen [Vérteen]
Has comprendido que tienes que comprar prendas para verte cada día distinto

Aprender: Lernen [Lérnen]
En Buenafuente están con la campaña 'Para aprender hay que leer, nen'

Enseñar: Lehren [Léren]
Contratas un profesor particular de canto y lo único que te enseña es a imitar el sonido de los loros

Explicar: Erklären [Erklaren]
No sabes explicar cual es tu color preferido, por lo que al final acabas diciendo " es claro"

Acertar: Treffen [Tréfen]
Haces una porra antes del partido con tus amigos y el que acierte el resultado se llevará unas trufas de chocolate

Equivocar(se): (sich) Irren [(sich) Igen]
Iré al programa de Iker Jiménez para decirle que está equivocado

Ir / Andar: Gehen [Géen]
Vas al médico y éste te dice que tienes los genes dañados y eso hace que andes cojeando

Llegar: Ankómmen [Ánkomen]
Cuando llegas a la meta de la carrera, ves a Ana comiendo una raja de melón

Volver: Zurückkommen [Zúgukomen]
Cada vez que te vuelves, todos tus alumnos se ponen a comer sugus

Venir: Kommen [Komen]
Tienes que preparar mucha comida, porque hoy vienen los que más comen

miércoles, 21 de enero de 2009

Aprender Alemán: Verbos I

Nuestro primer acercamiento al vocabulario será a través de los verbos. Únicamente utilizaremos los verbos en infinitivo (excepto "hay") y veremos que todos ellos acaban en -en. Relacionaremos el verbo en castellano y la pronunciación en alemán de forma inverosímil, como anteriormente explicamos. Una vez leída la asociación, cierra los ojos e imagínatela, añadiendo todo lujo de detalles. Empecemos por los 25 primeros:

Ser / Estar: Sein [Sáin] (Traducción [Pronunciación])
Cuando estás en la sala de estar te crees que eres Carlos Sainz

Nota: Explico esta primera asociación a modo de ejemplo. Tenemos que relacionar los verbos "ser" y "estar" con "sain", que es como se pronuncian en alemán, así que busco una palabra parecida que conozca ("sain" -> "Carlos Sainz").

Haber / Tener: Haben [Jáben]
Javi tiene clavados tenedores hechos de jabón

Hay: Es gibt [Esgíb]
Te caes por las pirámides de Egipto y no paras de gritar ¡Ay!

Querer: Wollen [Vólen]
Quieres volar y saltas desde la terraza, con pésimo resultado

Desear: Wünschen [Vúnchen]
Tienes tanta hambre, que al encontrarte con una lámpara con genio tu único deseo es que te llene el buche

Amar: Lieben [Lí(e)ben]
Te manifiestas para que te permitan amar a las liebres, ante las protestas de los cazadores

Ayudar: Helfen [Jélfen]
Estás liadísimo en el curro y tu jefe te ayuda para que no salgas tarde de la oficina (¡Toma asociación inverosímil!)

Intentar: Versuchen [Vérsujen]
Te cuelas en el vestuario femenino para intentar ver a las chicas en sujetador (No hace falta que estés media hora imaginándotelo)

Conseguir: Erreichen [Egáichen]
La guardia civil no para hasta que consigue que confieses que eres el gay chino, peligroso traficante

Pedir: Bitten [Bíten]
Un mendigo está pidiendo en el metro y tú le das un Bitter Kas

Necesitar: Brauchen [Brójen]
Al llegar a la fiesta te das cuenta que para cumplir el protocolo necesitas llevar un broche en la solapa

Vivir (Habitar): Wohnen [Vónen]
Te vas a vivir a otra ciudad y te das cuenta de que tu bono transporte ya no te vale

Sentir: Fühlen [Fúlen]
Sientes una alegría inmensa al levantar las cartas jugando al poker y ver que tienes un full

Doler: Schmerzen [Smérsen]
Aunque el dentista te quite la muela con esmero, no dejará de dolerte la boca

Ver: Sehen [Séen]
Para ver hace falta el sentido de la vista

Mirar: Anschauen [Ánsjoen]
Debido a tus problemas en el cuello, no puedes mirar hacia arriba, sólo puedes mirar a lo ancho

Oír: Hören [Jóren]
En un juicio juras en la Biblia que oíste como el acusado dijo "Te mataré" a la víctima

Escuchar: Zuhören [Tsújoren]
Escuchas una música con los cascos que te resulta tan sugerente que empiezas a desnudarte sin date cuenta

Gustar: Gern [Gern]
No hay nada que más te guste que ver germinar un geranio
Nota: Es un adverbio, pero vendría a sustituir al verbo "gustar" en castellano y se coloca detrás del otro verbo ("me gusta comer" -> "Yo comer gern")

Tocar: Berühren [Begúgen]
Te tocas la verruga del cuello para que te dé suerte con la lotería

Hablar: Sprechen [Espréjen]
Además de cuando hablas hay otras formas de expresar tus emociones con la comunicación no verbal

Decir: Sagen [Ságen]
Empiezas los chistes tal y como hacía Eugenio: "Saben aquel que dice..."

Leer: Lesen [Lésen]
Tu única lectura en todo el día es leer lo que pone en los cartones de leche

Prueba a ver si eres capaz de recordarlos

martes, 20 de enero de 2009

Aprender Alemán: Pronunciación

En la otra anotación se me quedó en el tintero mencionar la principal fuente del método: 'Aprende un idioma en 7 días' de Ramón Campayo (también autor de 'Aprende inglés en 7 días'). En el libro aparecen unas tablas a rellenar con cuatro columnas: la palabra en el idioma a aprender (alemán en nuestro caso), la pronunciación de dicha palabra, la palabra en nuestro idioma natal (castellano) y la asociación entre la pronunciación en alemán y la palabra en castellano.

Para rellenar dichas tablas estoy utilizando varios diccionarios para ver cual es la palabra en alemán que mejor que se adapta y es más común su utilización. Es por ello por lo que necesito la ayuda de aquellos que ya tengan un nivel básico de alemán para que me corrijan si he optado por una palabra no muy común en la traducción, o si para alguna palabra se suelen utilizar dos traducciones distintas.

Para la transcripción de la palabra escrita a su pronunciación utilizo algún diccionario con sonidos, para poder oír la palabra. Tras oír numerosas palabras, os expongo lo más importante que he detectado en la pronunciación de las palabras:

W: Se pronuncia como una V
V: Es como una V muy suave, que casi parece una F

LL: Se pronuncia como una L
L: Es como una L muy suave, que casi parece una H
H: Se pronuncia como una H aspirada, por lo que se parece a una J

R / RR: Es una mezcla entre una R y una G

CH: Es una mezcla entre una CH y una J
Z: Se pronuncia como TS
ß: Se pronuncia como SS

EI: Se pronuncia como AI (Bastante importante)
IE: La I sí que se pronuncia, pero la E apenas
E: Es una mezcla entre una E y EI
EU / ÄU: Se pronuncia como OI

Mi intención no es mostrar todo, sino simplemente lo más básico para que vayamos acostumbrándonos. No hace falta memorizarlo ya que mientras veamos ejemplos iremos aprendiéndolo. Vista la pronunciación, pasemos ya a aprender vocabulario. Empezaremos por los verbos.


viernes, 9 de enero de 2009

Aprender Alemán: Introducción

Vamos a iniciar el proyecto más ambiciosos de los que hemos abarcado en este blog: Aprender un idioma en tiempo record. Dentro de algo menos de dos meses tengo pensado hacer un viaje a Alemania y no sé absolutamente nada de alemán. Veamos como tengo pensado aprenderlo:

Cuando somos pequeños, lo primero que aprendemos de nuestra lengua natal es a decir alguna palabra suelta, luego les damos más sentido con algo de gramática y, por último, aprendemos a poner por escrito lo que decimos. Nosotros nos centraremos en pronunciar las palabras sin mucha preocupación en que ésta sea exacta o en su escritura.

Los niños pequeños aprenden los idiomas por necesidad y obligación (es su única manera de comunicar lo que desean), y por repetición y constancia (están todo el día oyéndolo y, más adelante, hablándolo). Nosotros intentaremos practicar todos los días un poco, aunque sean 10 minutos.

Existen tres grandes frenos en el aprendizaje de un idioma: vocabulario, pronunciación y gramática. Nosotros nos centraremos en las dos primeras, adquiriendo vocabulario aprendiendo primero cómo se pronuncia antes de cómo se escribe (como con el idioma natal y al contrario de como se suele enseñar). Una vez que tengamos un nivel de vocabulario mínimo, empezaremos a aprender la gramática más básica.

Para adquirir vocabulario haremos uso de uno de los fundamentos que vimos en apartado de 'Memoria': el método de enlace. Esta vez lo que haremos será enlazar la palabra en castellano con la forma de pronunciarlo en alemán (al ser una palabra en alemán, buscaremos una palabra en castellano que se le parezca). Con un poco de práctica acabaremos relacionando la palabra en castellano y en alemán sin necesidad de recurrir al método de enlace.

Ejemplo: Para aprender como se dice comer en alemán, vemos que se escribe essen y se pronuncia esen, por lo que crearemos una asociación entre el verbo 'comer' y su pronunciación en alemán ('esen'). Como 'esen' no significa nada para nosotros, haremos la relación con alguna palabra del castellano que se le parezca. En este caso imaginaremos una persona que come mucho mucho y empieza a engordar, poniéndosele un cuerpo con forma de ese (S) al engordar de tripa y de culo.